Ideas para hacer una almohada casera

Muchas veces sucede que queremos hacer algo con nuestras propias manos. Suele pasar que constantemente buscamos nuevas ideas para hacer una almohada casera.
Hacer una almohada casera es más fácil de lo que parece. Así, no sólo ahorrarás dinero sino que además, puedes practicar tus habilidades con la costura, en caso tal de que te guste.
A continuación, te explicaremos cómo hacer una almohada desde tu hogar ¡Hazla ya mismo!
¿Cómo hacer una almohada casera?
Sigue estos pasos y realiza una almohada cómoda, duradera y resistente ¡Te encantará!
Paso 1 Elige la tela
Casi cualquier todo tipo de tela sirve. Encárgate de escoger una tela que te guste, tomando también en consideración el tipo de almohada o cojín que quieras realizar.
Ten en consideración que si quieres realizar una almohada para dormir, la tela tiene que sentirse suave contra tu rostro. Recomendamos algodón.
Si por el contrario quieres una almohada para los muebles de tu sala de estar, asegúrate de que la tela combine con tus otros muebles.
Paso 2 Comienza a cortar la tela
Para empezar el proceso como tal, deberás cortar la tela en 2 cuadrados o rectángulos iguales.
Agrega 1. 50 centímetros (1/2 pulgadas) en cada lado, de modo que haya suficiente espacio para coser. El tamaño de las piezas depende del tamaño del cojín que desees realizar.
Ten en consideración que si la tela que escogiste tiene tendencia a deshilacharse, haz una costura francesa a los bordes o causas en un zigzag.
Seguidamente, deberás colocar las dos piezas de tela una frente a la otra. Si es necesario, garantiza los 3 bordes con pasadores para que sepas donde tendrás que coser más tarde.
Cose los 3 bordes
Empieza a coser tres bordes de la almohada. Use un color de hilo que corresponda a la tela que escogiste. También, puedes usar hilo blanco. Puedes coser los pedazos de tela a mano o a máquina.
Ubica los pedazos de tela anteriormente cortados y seleccionados, y coloca un retaso sobre el otro. Con la ayuda de una maquina o de tus manos, empieza a coser los bordes de la tela.
Te recomendamos empezar por los laterales y seguidamente por debajo. Deja la parte de arriba sin coser, para que así puedas introducir el relleno de la almohada.
Rellena tu almohada
Puedes rellenar tu almohada con diversos materiales. Para hacerte una idea, puedes rellenar tu almohada con poliéster, espuma o algodón. Esto realmente es a elección personal.
La espuma generalmente se emplea para rellenar los cojines de la sala de estar. También, para rellenar almohadas cuadradas. Puedes cortar la cantidad de espuma que necesitas con la ayuda de un cuchillo o de un exacto y con ello, rellenar la almohada.
Por otro lado, también puedes rellenar la almohada con algodón. El algodón puede hacer que tu almohada sea muy suave, y además te mantendrá en calor, pues lo emana. Aconsejamos este tipo de relleno para las almohadas de dormir.
El poliéster también es otra opción. Es una alternativa mucho más económica y al mismo tiempo, es fácil para rellenar. Suele emplearse para cojines o almohadillas.
Cuando te decidas por algún tipo de relleno, sólo deberás introducirlo por la parte de arriba, donde está sin coser. Rellena la almohada a tu preferencia.
Realiza las costuras finales
Una vez que introduzcas el relleno, realiza la costura final por la parte superior. Puedes completar tu almohada con una funda (si es para dormir) o puedes ubicarla directamente a donde desees. Será súper cómoda y duradera.
Haz tu almohada rápidamente y crea un ambiente de confort. Realizarla es supersencillo y te ahorrarás dinero.